No sufrió. Ratificó progresos defensivos. Atacó con fluidez en el segundo tiempo y jugó esa porción del partido con inteligencia. Argumentos viejos y nuevos para un Quilmes que se impuso 79-67 a Racing de Chivilcoy en uno de sus mejores partidos en esta Liga Argentina de Básquetbol.

El viento en contra lo resistió con Negrete y defendiendo con concentración y actitud. Esa fórmula le permitió al elenco de Manuel Gelpi jugarle a Racing un primer tiempo parejo.

El partido arrancó con dos triples del pibe nacido en General Alvear, pero enseguida la visita equiparó con un andar más sólido y su intención de repartir equitativamente los lanzamientos. El ex Peñarol Rodrigo Acuña y Gamazo lastimaron en zonas cercanas al cesto, pero tuvieron el apoyo de Barrales y el ingresado De Pietro con tiros de media distancia o penetraciones.

Los chivilcoyanos emparejaron y pasaron al frente. Pero no lograron escapar. Un poco porque anotaron nada más que un tiro de tres puntos en toda la primera etapa. Otro poco porque la defensa interior quilmeña fue creciendo en su dureza a medida que avanzaban los minutos.

Esa solidez le permitió a Quilmes superar sin mayores problemas el pasaje de tres minutos en el que Negrete estuvo sentado en el banco y en el que no anotó puntos.

Cuando el alero regresó a la cancha, aún muy marcado, se hizo cargo de una ofensiva raquítica y anotó otros 9 puntos para terminar con 21 de los 31 que su equipo logró en toda la primera parte. A Racing, sin embargo, también atacar le costó horrores y se llevó apenas un doble de ventaja (33-31) al entretiempo.

El tercer cuarto tuvo muy poco que ver con los otros, pero la paridad se mantuvo. Quilmes dejó de depender de Negrete, movió la pelota con más fluidez, encontró mejores tiros y lastimó con un gran cuarto de Jara (9) y con tres bombas de tres puntos de Lucio Castellani.

Racing, sorprendido, equiparó del otro lado con el continuo aporte ofensivo de Acuña, la picardía de Barrales y De Pietro para manejar la ofensiva y una buena aparición de Ricardo Fernández con ocho puntos en el parcial.
Al cuarto final llegaron igualados en 55, con todo por definir. Y Quilmes lo jugó con una madurez colectiva inusual. Recuperó la solidez defensiva del primer tiempo y volvió a repartir los tiros de manera más equilibrada.
Negrete no acaparó juego y, sin embargo, todos fueron capaces de anotar. Con esa solidaridad, el equipo local le terminó de torcer el brazo a un Racing que había jugado apenas un día atrás en Olavarría y se fue quedando sin claridad y sin piernas. Justo premio para los dirigidos por Manuel Gelpi.

Síntesis

Quilmes (79): F. Gago 5, A. Jara 17, A. Negrete 25, L. Castellani 13 (x) y T. Nally 0 (FI); A. Ecker 4, L. Catelotti 6, D. Skidelski 0, F. González 6, F. Arraiz 3, L. Arata 0 y A. Marino 0. DT: Manuel Gelpi.

Racing (Chivilcoy) (67): A. Barrales 5, R. Fernández 8, M. Morera 2, J. Gamazo 12 y R. Acuña 23 (FI); E. De Pietro 10, A. Maretto 5, C. Báez 0, E. Mazzeo 2 y L. Piccinelli 0. DT: Diego D’Ambrosio.

Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Árbitros: Rodrigo Castillo-Alejandro Zanabone-Edelmar Biset.
Parciales: 17-19, 31-33 y 55-55.

Informe: La Capital

Fotos: Prensa Quilmes de Mar del Plata